Publicado originalmente en OMIWORLD.ORG

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Los miembros del Gobierno Central están visitando a los Oblatos y a los miembros de la familia carismática en la región de Canadá y Estados Unidos, en preparación para la Sesión Conjunta en Washington DC del 7 al 13 de julio. ¿Alguna vez te has preguntado sobre la historia de estas sesiones y su impacto en la congregación?

Los Misioneros Oblatos de María Inmaculada (OMI) tienen una rica historia de evangelización y cercanía con los pobres. Las Sesiones Conjuntas son fundamentales para esta misión, proporcionando un espacio para la colaboración, la reflexión y la planificación estratégica.

San Eugenio de Mazenod, nuestro fundador, enfatizó la unidad, el discernimiento colectivo y el apoyo mutuo entre los Oblatos para servir efectivamente a los pobres y a la Iglesia.  Esto sentó las bases para las Sesiones Conjuntas. Inicialmente, estas eran reuniones informales para discutir problemas, compartir experiencias y encontrar soluciones.

A medida que la importancia de estas reuniones creció, se formalizaron. Para mediados del siglo XX, las Sesiones Conjuntas se convirtieron en eventos regulares en el calendario de la Congregación, reflejando un compromiso con la formación continua, la colaboración y el crecimiento espiritual para fortalecer la misión de la Congregación en todo el mundo.

El objetivo principal de las Sesiones Conjuntas es fomentar la unidad y la colaboración entre los miembros regionales y el gobierno central. Estas sesiones promueven la comunicación abierta, construyendo confianza y apoyo mutuo. También ofrecen un foro para discutir y abordar los desafíos que enfrenta la Congregación en regiones específicas.

Las Sesiones Conjuntas incluyen sesiones plenarias, talleres, discusiones en grupo y reflexiones espirituales. Este enfoque integral aborda tanto los aspectos prácticos como espirituales del trabajo misionero, reforzando la identidad y misión de la Congregación de evangelizar a los pobres y marginados.