Por Jim Brobst, OMI y Paul Hughes, OMI, Introducción de Harry Winter, OMI

En nuestra primera entrega, mencionamos lo mucho que San Eugenio vivía la sinodalidad, aunque tal vez no utilizara la palabra (La sinodalidad y los Oblatos: Parte 1). Dado que el núcleo de la sinodalidad es la misión, San Eugenio mira por encima de nuestros hombros cuando invertimos en la sinodalidad. Haga clic aquí para ver Sinodalidad y los Oblatos Parte 3

Michael Hughes, OMI, de la Provincia Anglo-Irlandesa documentó esto cuando describió la visita de San Eugenio a Inglaterra en 1850.  “Hoy diríamos que había puesto la misión oblata en el camino sinodal” (p. 14, Oblate Connections, mayo de 2022, nº 54).  El P. Hughes explica cómo San Eugenio “reunió a sus hombres y causó una sorprendente impresión de graciosa nobleza en los diversos dignatarios que conoció” (p. 15). Esta “graciosa nobleza” le ayudó a superar el clericalismo y a trabajar por igual con laicos y clérigos.

Washington, DC, Residencia oblata, Jim Brobst, OMI

El 12 de mayo, 8 de los 12 Oblatos que residen en Washington, DC, se reunieron para discutir sobre la sinodalidad… y yo guié nuestra discusión.  Aunque nuestra discusión comunitaria fue a menudo más bien intelectual e histórica en su enfoque, también tuvimos algunos momentos fuertes de revelación personal. El hecho de tener algo distinto a los negocios que discutir fue en sí mismo lo mejor de la reunión.  A menudo se nos da bien el aspecto administrativo y empresarial de la misión, pero no tanto la profundidad de la comunidad que forma parte de la misión.  Este debate nos dio la oportunidad de profundizar más de lo habitual.

El 14 de mayo llevé nuestro resumen a la reunión a nivel arquidiocesano, en la parroquia de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.  Asistieron unas sesenta y cinco personas, entre ellas el cardenal Gregory, laicos, religiosos y párrocos.  Entre los reporteros había desde la Hna. Jeannine Gramick, defensora desde hace mucho tiempo del colectivo LGBTQ dentro de la Iglesia, hasta defensores de la misa en latín.  Había una gran diversidad de edades, etnias, culturas y educación entre los presentes.

Estas son las impresiones que me gustaría compartir de ambas reuniones.

Una de las reflexiones más interesantes, secundada por varias personas, fue que parece que partimos de preguntas predeterminadas.  ¿Son éstas las necesidades reales?  También parece presuponerse un nivel educativo bastante alto. ¿Qué pasa con las personas marginadas?  ¿Forman realmente parte del proceso?

El procedimiento parece estar ponderado desde y hacia la diócesis.

Las órdenes religiosas, tanto masculinas como femeninas, tienen un enfoque diferente.  La naturaleza misma de nuestra existencia es ejercer un ministerio que no está dentro del ámbito sacramental de la vida parroquial básica.  Al mezclar toda la respuesta de los religiosos con votos en una estructura diocesana de información, ¿se están teniendo en cuenta las perspectivas únicas de las comunidades de hombres y mujeres consagrados?

Los eventos sinodales son sólo ocasionales; la sinodalidad debe ser continua.  Nuestros lugares de ministerio no pueden ser simplemente estaciones de carga para nuestra energía personal y nuestra fe.  Deben estar orientados a la misión por naturaleza.  La verdadera evangelización depende de comunidades de fe fieles y florecientes, ya sean parroquias o comunidades religiosas.

Brownsville, TX, Parroquia de San Eugenio de Mazenod, Paul Hughes, OMI

Nuestro informe final del sínodo fue presentado la semana pasada, el 9 de mayo.  Sentí que muchos Tex/Mex que crecieron al otro lado de la frontera tienen un sentido diferente de la iglesia y se sienten muy incómodos al presentar sus experiencias de fe, especialmente en su religiosidad popular que no es parte de la experiencia de la Iglesia Americana. Tenemos tejanos de invierno del norte que participaron en los grupos pequeños y está bastante claro que hay dos modelos distintos de Iglesia que operan en el país.

Otra preocupación: ¿deben el Papa Francisco y su equipo presentar claramente lo que se puede discutir y los temas que se consideran fuera de la mesa.  ¡¡¡¡¿Estamos llevando a la gente por un camino de temas de los que nunca se hablará, por ejemplo, mujeres sacerdote, clero casado, Eucaristía a los católicos divorciados, bendiciones a los LGBTQ, etc.!!!!

Hay un buen artículo en la reciente revista America, Primavera 2022, “La Iglesia Conciliar/Pasado y Presente”, una entrevista con Joseph Komonchak sobre el legado del Vaticano II.

Conclusión, Harry Winter, OMI

El papel de la Hna. Jeannine Gramick en el proceso de Washington DC es digno de mención.  Su asociación con el P. John Harvey, O.S.F.S. y sus enseñanzas en el Colegio Oblato de Washington, DC, de 1970 a 1995, serán exploradas en el próximo número de Sinodalidad y Oblatos. La parte 3 incluirá el Sagrado Corazón, Oakland, CA, y Santa María, Georgetown/Rowley, MA. El tema LGBTQ fue prominente en Santa María.

Las respuestas de más lugares de ministerio oblato en los EE.UU., con respecto a la sinodalidad, son muy bienvenidas.

La primera parte de esta serie es ahora el primer artículo en la página principal del sitio web Misión-Unidad-Diálogo.  Este artículo se colocará pronto allí: www.harrywinter.org.