para Andrew Chen OMI, Australia
Han pasado 18 meses desde que comenzó la actual pandemia mundial; sigue causando estragos a millones de personas en todo el mundo y no hay señal de que vaya a terminar. Ha creado tanta incertidumbre e inseguridad que muchas actividades se han pospuesto o cancelado por completo.
Inicialmente, el taller de formación oblata para formadores del posnoviciado estaba previsto en Aix-en-Provence en julio del 2020. Se pospuso a julio del 2021 y se celebraría en Roma con la esperanza de facilitar los viajes internacionales. Una vez más, se demostró que era imposible, ya que la pandemia está lejos por termina. Sin embargo, el equipo organizador, bajo la dirección del P. Cornelius Ngoka OMI, Asistente General, consideró que un taller de este tipo era demasiado importante como para retrasarlo más, y mucho menos cancelarlo, y decidieron seguir adelante con un formato híbrido: los que pueden, se reúnen en la Casa General, y los que no, se unen en línea.
Gracias al trabajo y la perseverancia del equipo de organización y animación, el taller comenzó el 5 de julio del 2021. Hasta ahora, hemos pasado casi dos semanas juntos para compartir, reflexionar, escuchar, afirmar y apoyarnos mutuamente en el ministerio de la formación para la Congregación.
Las actividades cuotidianas del taller se dividen en dos partes: la sesión por la mañana es adicional para que los que están en Roma. Allí se familiarizan con los distintos servicios de la administración general, y la sesión plenaria de la tarde es todos los participantes.
La primera semana la dedicamos a compartir personalmente: formadores de África-Madagascar, Asia-Oceanía, Europa, América del Norte y América del Sur, compartieron su camino personal oblato y la experiencia de trabajar en el ministerio de la formación. Además, se nos pidió que reflexionáramos y compartiéramos sobre las dos preguntas: ¿Qué llamadas estamos escuchando de esta sociedad cambiante? ¿Cómo debemos preparar mejor a nuestros formados para la Iglesia y la sociedad post COVID-19?
El intercambio ha sido extraordinariamente rico, diverso y perspicaz, ha ayudado a resaltar el rostro diverso del mundo y de los oblatos. Al final de la semana, tuvimos la oportunidad de escuchar al P. Louis Lougen presentar el estado actual de los Oblatos en el mundo, y tener un diálogo a solas con el P. General y pudimos hablar de todos los asuntos relacionados con la vida y el ministerio de la Congregación.
La segunda semana, tuvimos dos presentadores, el P. Tim Norton, SVD, y el P. Mokone Rathokhoa OMI, superior de la Casa General. Ellos presentaron dos temas: Interculturalidad y Acompañamiento Humano. El P. Tim compartió sus propias experiencias como misionero en México, formador en Australia, y ahora como persona de referencia para los formadores de los SVD y el programa de formación permanente, y habló de la formación misionera en un contexto intercultural, la espiritualidad y la interculturalidad, y el liderazgo en la interculturalidad.
El P. Mokone hablo de la importancia del crecimiento humano y el acompañamiento.
Estas presentaciones me hacen ser más consciente de la realidad cada vez más compleja del ministerio de la formación debido a las comunidades interculturales del mundo oblato, ya que los antecedentes son tan diferentes para los jóvenes que entran en la formación oblata.
Como nos recordó el P. Louis, este ministerio de la formación es para la Congregación oblata, y no sólo para una unidad o cultura particular, los lugares de misión de hoy y del futuro esperan oblatos que abracen firmemente la dinámica intercultural de la misión y que sean seres humanos maduros y equilibrados, en contacto con su humanidad y la humanidad de Jesucristo.
Estas dos semanas han sido realmente enriquecedoras para mí al escuchar maravillosas aportaciones y, lo que es más importante, al pasar tiempo con otros hermanos oblatos en el ministerio de la formación. Estoy deseando que lleguen las próximas dos semanas del taller.