The Missionary Oblates of Mary Immaculate serve poor and abandoned people in the United States and 70 countries around the world.

Siempre en peligro de muerte

Filipinas

Publicado Originalmente en OMIWORLD.ORG

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Obispo Angelito LAMPON, OMI

El 26 de mayo de 2018, el Obispo Oblato Angelito LAMPON, Vicario Apostólico de Jolo, ordenó presbíteros a tres jóvenes oblatos: PP. Harold LAGNAODA, Roy PACIENTE y Anthony SOTOMIL. Monseñor Angelito, cuyo predecesor fue asesinado, sabe bien que ser un obispo católico, presbítero o religioso en esta zona, es peligroso y pudiera significar también llegar hasta el martirio. En la homilía de la ordenación recordó a los jóvenes presbíteros este hecho.

Enfatizó el carácter misionero de los Oblatos, esto es, servir a los más abandonados, sin considerar la propia comodidad o el riesgo de la vida, especialmente en el Vicariato de Jolo.

Prosiguió describiendo las zonas misioneras que están en su gran mayoría pobladas por los devotos islámicos y los extremistas y en donde tres oblatos han entregado sus vidas perdiéndolas como misioneros: Monseñor Ben DE JESUS (+ 1997), quien fue derribado por seis balas de un asaltante; P. Benjamin INOCENCIO (+ 2000), que sucumbió cuando una bala perforó su cráneo y su cuello; y el P. Reynaldo RODA (+ 2009), quien fue sacado a la fuerza de su capilla de Notre Dame de Tabawan mientras estaba rezando, para ser golpeado y más tarde asesinado con cuchillos y balas.

(de izquierda a derecha) Mgr. Ben DE JESUS (†1997), P. Reynaldo RODA (†2008) y P. Benjamin INOCENCIO (†2000)

Uno de los que iban a ser ordenados, Harold LAGNAODA, que tuvo su tiempo de experiencia misionera en Bongao, también sufrió un violento golpe en su oído cuando la lancha rápida en la que navegaba junto al P. Federico LABAGLAY y oros siete de camino a una isla vecina, volcó y los dejó atrapados contra un buque pesado. De todos modos, estas terribles condiciones son parte del ser Oblato: estar preparados y desear dar la propia vida aún en peligro de muerte. Ellos se abandonan devotamente a la gracia de Dios y a la intercesión de la Bienaventurada Virgen María.

La oblación de servir a los más abandonados permanece en el lugar principal del corazón de los Oblatos. Por eso, las palabras del difunto P. Maurice HEMANN continúan resonando en la mente de Monseñor LAMPON: “Allá donde se te destine, mientras continúes amando a Dios y a la gente, encontrarás siempre algo bueno que hacer. ¡No te preocupes!”.  Incluso en las islas remotas de Tawi-Tawi como Cagayan de Mapun, donde uno se puede sentir abandonado, el viaje en barca es imprevisible y el número de cristianos es mínimo, los Oblatos siguen sirviendo a los isleños que son los más pobres entre los pobres, por amor a Dios y a su pueblo. (OMI Philippines Newsletter, Junio de 2018)

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