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El 15 de marzo en el Palacio Presidencial de Varsovia tuvo lugar la ceremonia de nombramiento de 10 lugares como monumentos históricos de Polonia. Entre ellos se encontraba “Swiety Krzyz” (Santa Cruz), un antiguo monasterio benedictino que durante ya muchos años sirve ahora de noviciado de los Oblatos de María Inmaculada.

Esta inclusión en la lista de monumentos históricos es un modo que tiene Polonia para protejer territorios y edificios que tengan especial valor histórico, científico o artístico y que sean de relevancia para el patrimonio cultural polaco.

Hasta mediados del siglo XVII la Santa Cruz fue el santuario polaco más importante. Dicho honor lo ostenta ahora el monasterio de Jasna Góra, en Czestochowa: el santuario de la “Virgen Morena”. Los documentos históricos muestran que el santuario de la Santa Cruz era ya famoso en el siglo XIV. El rey Wladyslaw Jagiello hizo de él un lugar especial de peregrinación. Desde la Edad Media el monasterio fue uno de los centros intelectuales y culturales de Polonia, contando con una importante biblioteca.

Se veneran en el santuario las reliquias de la Santa Cruz. La abadía benedictina original fue fundada aquí por Boleslaw Chrobryin en 1006. Según el Personal oblato, la Santa Cruz fue erigida formalmente como casa de los Oblatos de María Inmaculada el 1 de enero de 1936. Desde entonces cientos de jóvenes oblatos comenzaron allí su formación primera, saliendo luego para ser misioneros en todo el mundo. (http://www.oblaci.pl/aktualnosci/943)